El emir de Dubai, Mohamed bin Rashid al Maktum, acosó e intimidó a su exesposa, la princesa Haya Al Hussein de Jordania, hasta «niveles particularmente desproporcionados», dictaminó la Alta Corte de Londres.
El emir al Maktum, de 72 años, «mostró constantemente un comportamiento coercitivo y manipulador hacia los miembros de su familia que considera que actúan contra sus deseos», afirmó el juez Andrew McFarlane, al cierre de la batalla judicial por la custodia de sus dos hijos, que quedarán bajo la custodia de la princesa Haya.
La justicia británica dictaminó en octubre de 2021 que Mohamed bin Rashid al Maktum, que mantiene desde hace tiempo relaciones diplomáticas con Isabel II y comparte la afición de la reina por los caballos, había autorizado el pirateo del teléfono de su esposa y de sus abogados británicos.
El juez McFarlane señaló que el soberano la había «acosado e intimidado (…) antes de que se marchara a Inglaterra y desde entonces».
En marzo de 2020, un tribunal de familia británico estableció asimismo que el emir había «encargado y orquestado» el secuestro de dos de sus hijas de otra esposa, la princesa Shamsha, en 2000 en Cambridge, y de su hermana Latifa.
La princesa Haya será ahora la única responsable de la atención médica y la escolarización de los dos niños. El padre podrá tener contacto indirecto con ellos, por ejemplo, por teléfono, determinó el tribunal.
En un comunicado, la princesa Haya comparó los últimos años con un «viaje aterrador», pero afirmó que había encontrado «un extraordinario refugio, protección y compasión» en el Reino Unido.
Un portavoz de Mohamed bin Rashid al Maktum aseguró por su parte que este «ama a sus hijos» y «siempre los ha cuidado y mantenido, y siempre lo hará». Y sigue negando las acusaciones realizadas en este procedimiento», subrayó.
La oficina de Derechos Humanos de la ONU todavía no ha recibido ninguna prueba que demuestre que la princesa Latifa bin Mohammad al Maktum, hija del emir de Dubai, siga con vida, a pesar de los contactos mantenidos con autoridades de Emiratos Árabes Unidos.
La princesa Latifa acusó a su padre, el Emir de Dubai, de encarcelarla durante tres años en 2002, cuando también intentó escapar, y nuevamente en 2018.
La ONU planteó sus dudas a la representación emiratí en Ginebra, a la que reclamó expresamente una prueba de vida que no recibió. «Todavía no», reconoció el portavoz Rupert Colville al ser interrogado en rueda de prensa sobre la obtención de dicha prueba, según la BBC.
La princesa intentó por primera vez escapar de Dubai cuando aún era adolescente, pero su caso dio la vuelta al mundo en 2018, después de que abandonase el país en un barco junto a una antigua monitora. La embarcación fue interceptada tras ocho días de navegación frente a las costas de India.
Desde su reclusión en Dubai, la princesa afirma que su hermana Shamsa, ahora de 38 años, fue “esclavizada” y abusada física y mentalmente. Desde 2000 no ha sido vista en público y se desconoce su paradero.
Días después de conocerse que la princesa Latifa Al Maktoum de Dubai, desde su reclusión en algún punto de su país, pidió a la policía británica ayuda para buscar a su hermana Shamsa, se ha filtrado a la prensa la desgarradora carta con su solicitud.
En dos páginas, la princesa Latifa describen cómo la princesa Shamsa, que huyó de la finca del emir Mohammed al Maktoum de Dubai en Surrey (Inglaterra) en 2000, trató de escapar de su vida en el palacio en búsqueda de libertad.
Dirigiéndose “A la policía de Cambridge”, Latifa escribió: “Ella escapó porque… no tenía libertad de elección en su vida y fue esclavizada y oprimida y sufrió abuso físico a manos de miembros de su familia”.
Shamsa, que ahora tiene 38 años, había intentado huir de su padre en agosto de 2000 cuando se encontraba en Inglaterra. Desde entonces, nada se sabe de ella.
“Personalmente fui testigo de cómo **** la golpeaba repetidamente en la cara y en la cabeza… Este es solo un ejemplo de los muchos abusos que la vi sufrir… Hice todo lo posible para salvarla, pero no pude”, lamentó.
Al detallar el secuestro de Shamsa ocurrido en Surrey hace 21 años, Latifa escribió en la carta, publicada por la BBC: “La sacaron a rastras de la calle pateando y gritando, la tranquilizaron y la llevaron en avión de regreso a Dubai”.
Shamsa, que entonces tenía 18 años, supuestamente fue drogada y trasladada a Dubai a través del norte de Francia utilizando el helicóptero privado y el jumbo jet de su padre, y no fue vista en público durante más de 20 años.
“Todo lo que le pido es que por favor preste atención a su caso porque podría darle libertad, su ayuda y atención en su caso podría liberarla. Tiene fuertes vínculos con Inglaterra… realmente ama Inglaterra, todos sus mejores recuerdos son de su tiempo allí”, dijo Latifa.
Agregó: “La mantuvieron incomunicada sin fecha de liberación, juicio ni acusación. Fue torturada con bastones en las piernas”.
La policía de Cambridgeshire confirmó la recepción de la carta de la princesa Latifa, que ahora será “considerada como parte de la investigación en curso”. “Este es un asunto muy complejo y serio y, como tal, hay detalles del caso que sería inapropiado discutir públicamente”, dijo un portavoz de la policía.
Shamsa escribió más tarde en una carta que aparentemente logró sacar del cautiverio de contrabando que “mi padre me atrapó”. Ella escribió: “Él logró rastrearme a través de alguien con quien me mantuve en contacto. Envió a cuatro árabes para atraparme”.
“Llevaban armas y me amenazaban”, dijo Shamsa. “Me llevaron a la casa de mi padre en Newmarket, allí me pusieron dos inyecciones y un puñado de píldoras. A la mañana siguiente llegó un helicóptero y me llevó al avión, que me llevó de regreso a Dubai. Estoy encerrada”.
Texto completo de la carta de Latifa de Dubai sobre su hermana: “Libertad es lo único que quiere en la vida”
“Para la policía de Cambridge, mi nombre es Latifa Al Maktoum, nací el 5 de diciembre de 1985, soy la hermana de Shamsa Al Maktoum. En el verano de 2000, Shamsa escapó de la casa de vacaciones de la familia en Inglaterra, tenía 18 años en ese momento y estaba en su sano juicio. Ella escapó porque [BORRADO]… no tenía libertad de elección en su vida y fue esclavizada y oprimida y sufrió abuso físico a manos de miembros de su familia.
“Yo personalmente presencié a [BORRADO] golpearla en la cara y en la cabeza porque ella [BORRADO]. Este es solo un ejemplo de los muchos abusos que la vi sufrir. Esta paliza en particular ocurrió el [BORRADO]. Quería solicitar asilo en el Reino Unido, donde tiene familiares que viven allí permanentemente.
La princesa Latifa acusó a su padre, el Emir de Dubai, de encarcelarla durante tres años en 2002, cuando también intentó escapar, y nuevamente en 2018.
“Después de unos meses fue secuestrada [BORRADO]. La sacaron a rastras de la calle pateando y gritando, la tranquilizaron y la llevaron en avión de regreso a Dubai. Estuvo encarcelada hasta 2008. [BORRADO]. La tortura solo comenzó después de que perdí la comunicación con ella en mayo de 2001.
“La mantuvieron incomunicada sin fecha de liberación, juicio ni acusación. Fue torturada con bastones en los pies, que es algo que yo mismo experimenté con mi propio encarcelamiento. [BORRADO]. Después de ser liberada de su encarcelamiento, fue enviada de regreso a la situación abusiva y opresiva de la que escapó.
“Su objetivo final es ser una persona emancipada, vivir con dignidad y tener libertad de elección y libertad de movimiento. [BORRADO]. Ella quiere los derechos básicos a los que todos los seres humanos tienen derecho. Tiene fuertes vínculos con Inglaterra porque allí pasó casi todas sus vacaciones de verano debido a su cercanía con los miembros de su familia que viven allí.
“Ella realmente ama Inglaterra, todos sus mejores recuerdos son de su tiempo allí. Como su hermana hice todo lo posible por salvarla, pero no pude. Solo tenía 14 años en el momento de su secuestro. También fui encarcelada y torturada, hice un testimonio en video sobre mi propia experiencia. [BORRADO]. Todo lo que podemos hacer es intentar llegar a un país libre y [BORRADO].
“Shamsa fue secuestrada de manera ilegal en suelo británico. [BORRADO]. Lo único que pido es que por favor le presten atención a su caso porque podría darle su libertad, que es lo único que quiere en la vida. Muchos de nosotros fuimos encarcelados, torturados y sufrimos mucho como resultado de su secuestro. Su ayuda y atención en su caso podrían liberarla. Saludos cordiales, Latifa Al Maktoum”.
Cronología: el emir de Dubai y sus hijas “prisioneras”
15 de agosto de 1981: Nace la jequesa Shamsa bint Mohammed bin Rashid Al Maktoum, una de las hijas mayores del jeque Mohammed, quien tiene varias esposas.
5 de diciembre de 1985: Nace la jequesa Latifa bint Mohammed bin Rashid Al Maktoum.
Verano de 2000: durante una visita a Inglaterra, Shamsa escapa de su familia y busca asesoramiento sobre inmigración para intentar quedarse en el Reino Unido.
Agosto de 2000: Shamsa secuestrada en las calles de la ciudad británica Cambridge por hombres que trabajan para su padre. La llevan a la casa de su padre en Newmarket, antes de ser llevada en helicóptero a Francia y luego a Dubai. No se la ha vuelto a ver en público desde entonces.
Junio de 2002: Latifa hace su primer intento de fuga, pero es capturada en la frontera de los Emiratos Árabes Unidos con Omán y regresada a Dubai por orden de su padre. Dice que posteriormente estuvo encarcelada hasta 2005.
2010: Latifa conoce a Tiina Jauhiainen, una instructora de artes marciales finlandesa. Entablan una relación cercana, y la princesa luego le cuenta sobre su intento de fuga anterior y lo que le había sucedido a Shamsa.
2017: Latifa y Tiina comienzan a planear su escape. Tiina viaja a Filipinas para encontrarse con un exespía y oficial naval francés, Herve Jaubert.
24 de febrero de 2018: Latifa y Tiina escapan conduciendo a Omán, donde abordarían un bote para llegar a aguas internacionales antes de usar motos de agua a bordo del barco de bandera estadounidense “Nostromo”, capitaneado por Jaubert.
4 de marzo de 2018: El “Nostromo” es interceptado por unidades de comando, incluidas las fuerzas especiales indias, que secuestran a Latifa y la llevan de regreso a los Emiratos Árabes Unidos.
16 de febrero de 2021: Nuevos videos salen a la luz en los que Latifa, hablan desde su “cárcel en una villa”, describe cómo los agentes de su padre frustraron su intento de fuga y dice que está siendo “rehén”.
25 de febrero de 2021: Latifa pide a la policía británica que vuelva a investigar el secuestro de su hermana mayor en Cambridge en el año 2000, en una carta divulgada por la BBC.
Las fuerzas especiales indias “secuestraron” a la princesa Latifa de Dubai a bordo de un yate y la devolvieron a su padre, el riquísimo emir de Dubai, en un intercambio secreto por un muy buscado traficante de armas británico, según reveló una exclusiva del diario británico The Daily Mail.
Según la investigación, Christian Michel fue extraditado a India desde Dubai solo unas semanas después de que la princesa Latifa Al Makhtoum, una de las hijas del gobernante de Dubai, el jeque Mohammed bin Rashid Al Mkhtoum, fuera capturada por las fuerzas especiales indias frente a la costa de Goa en marzo de 2018.
Michel está acusado de aceptar un soborno de £40 millones para vender helicópteros de fabricación británica a la India. Un informe del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Detenciones Arbitrarias “ha unido oficialmente la extradición a la captura de Latifa, pero no la menciona por su nombre”, dice el Daily Mail.
Capturada en un yate en Goa
La princesa Latifa acusó a su padre, el Emir de Dubai, de encarcelarla durante tres años en 2002, cuando también intentó escapar, y nuevamente en 2018.
En su investigación sobre la detención de Michel, el grupo dice: “Se le dijo al señor Michel que su extradición se realizó a cambio de la incautación anterior y la devolución de un detenido de alto perfil a Dubai, a pesar de la petición de asilo del detenido por las fuerzas indias que interceptaron el yate en aguas internacionales frente a la costa de Goa en marzo de 2018”.
Latifa habló de su aterradora captura en 2018 en una serie de videos grabados en secreto obtenidos por MailOnline y BBC Panorama. En ellos, la princesa de 35 años contó cómo hombres armados la redujeron y la sacaron del yate que intentaba llevarla a una nueva vida lejos de Dubai.
Latifa dijo que fue drogada y trasladada de regreso a Dubai por orden de su padre, el jeque Mohammed Al Maktoum. El emir, por su parte, negó todas las denuncias de abuso hechas por su hija, que es una de los 30 hijos que tiene con seis esposas.
La princesa Latifa, de 35 años, hija de Mohamed bin Rashid al Makhtoum, afirma estar privada de su libertad desde 2018.
Seis meses después del incidente, Michel, que vivía en Dubai, fue extraditado a la India. La justicia había rechazado una solicitud de extradición anterior de la India después de que las autoridades indias no presentaran ninguna prueba “seria” de corrupción.
Michel está acusado de sobornar y conspirar criminalmente con funcionarios indios para ganar un contrato en nombre del fabricante británico de helicópteros Augusta Westland por 12 helicópteros en 2010. La nueva flota de helicópteros iba a ser utilizada por el Presidente de la India y otros ministros del Gobierno, dijo el periódico.
“La publicación del informe de la ONU aumentará la presión sobre las autoridades de Dubai para que actúen sobre Latifa”, dice el citado periódico.
Latifa tuvo una relación difícil con su familia a lo largo de los años que la ha llevado a intentar escapar del emirato en dos ocasiones: lo intentó por primera vez en 2002 y finalmente en 2018, cuando la habrían capturado los agentes indios. Ahora afirma que su padre la tiene cautiva y la amenaza con dispararle a menos que coopere.
Su hermana, la princesa Shamsa, también trató de escapar de Dubai cuando tenía 19 años en 2000 porque estaba enojada porque su padre no la dejaba ir a la universidad y reclamaba el respeto de los derechos humanos en el emirato.
La princesa de 35 años, hija de Mohammed bin Rashid al-Maktum, monarca de Dubai y primer ministro de Emiratos Árabes Unidos, intentó sin éxito escapar en barco de esa ciudad-Estado del Golfo.
15 de agosto de 1981: Nace la jequesa Shamsa bint Mohammed bin Rashid Al Maktoum, una de las hijas mayores del jeque Mohammed, quien tiene varias esposas.
5 de diciembre de 1985: Nace la jequesa Latifa bint Mohammed bin Rashid Al Maktoum.
Verano de 2000: durante una visita a Inglaterra, Shamsa escapa de su familia y busca asesoramiento sobre inmigración para intentar quedarse en el Reino Unido.
Agosto de 2000: Shamsa secuestrada en las calles de la ciudad británica Cambridge por hombres que trabajan para su padre. La llevan a la casa de su padre en Newmarket, antes de ser llevada en helicóptero a Francia y luego a Dubai. No se la ha vuelto a ver en público desde entonces.
Junio de 2002: Latifa hace su primer intento de fuga, pero es capturada en la frontera de los Emiratos Árabes Unidos con Omán y regresada a Dubai por orden de su padre. Dice que posteriormente estuvo encarcelada hasta 2005.
2010: Latifa conoce a Tiina Jauhiainen, una instructora de artes marciales finlandesa. Entablan una relación cercana, y la princesa luego le cuenta sobre su intento de fuga anterior y lo que le había sucedido a Shamsa.
2017: Latifa y Tiina comienzan a planear su escape. Tiina viaja a Filipinas para encontrarse con un exespía y oficial naval francés, Herve Jaubert.
24 de febrero de 2018: Latifa y Tiina escapan conduciendo a Omán, donde abordarían un bote para llegar a aguas internacionales antes de usar motos de agua a bordo del barco de bandera estadounidense “Nostromo”, capitaneado por Jaubert.
4 de marzo de 2018: El “Nostromo” es interceptado por unidades de comando, incluidas las fuerzas especiales indias, que secuestran a Latifa y la llevan de regreso a los Emiratos Árabes Unidos.
«Todo lo que pido es que por favor presten atención a su caso porque podría ayudarle a recuperar la libertad», escribe Latifa en la carta manuscrita, entregada el miércoles a la policía de Cambridgeshire por amigos de la princesa de 35 años.
Su hermana mayor, la princesa Shamsa, que ahora tiene 39 años, había intentado huir de su padre, Mohamed bin Rashed al Maktum, de 71 años, emir de Dubai y primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos, en agosto de 2000 cuando se encontraba en Inglaterra.
Según Latifa, Shamsa fue hallada dos años después de su huida, «drogada», devuelta a Dubai en un jet privado y «encerrada». No se la ha vuelto a ver desde entonces.
La policía de Cambridgeshire confirmó que había recibido la carta de la princesa y aseguró que sería «examinada» como parte de una «revisión en curso» de la investigación sobre la desaparición de Shamsa, junto con los vídeos de Latifa. «Este es un asunto complejo y serio», dijo un portavoz policial, y sería «inapropiado» revelar «detalles».
En marzo de 2020, la policía británica anunció que revisaría la investigación sobre lo ocurrido a Shamsa en Cambridge, a raíz de una sentencia de la justicia británica según la cual el emir de Dubai había ordenado el secuestro de sus dos hijas.
La princesa Latifa acusó a su padre, el Emir de Dubai, de encarcelarla durante tres años en 2002, cuando también intentó escapar, y nuevamente en 2018.
En 2018, la princesa Latifa había intentado escapar de la rica ciudad-estado del Golfo antes de ser escoltada de vuelta.Ahora, allegados suyos afirman ahora no saber nada de ella desde hace varios meses y tanto el gobierno británico como la ONU pidieron pruebas de vida.
En unos vídeos grabados en 2019 y difundidos la semana pasada por medios británicos, Latifa afirma que ella misma estaba retenida como «rehén» en una «mansión convertida en prisión» y que temía por su vida. La embajada emiratí en Londres aseguró que la princesa está siendo «atendida en su hogar».
En marzo de 2018, Latifa había anunció en un vídeo difundido por YouTube que quería huir de su país. Al borde de las lágrimas, dijo que su padre la había «torturado» y «encarcelado durante tres años» tras un primer intento de fuga cuando era sólo una adolescente en 2002.
El secretario de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, Dominic Raab, exigió que el emir gobernante de Dubai proporcione pruebas de que su hija, la princesa Latifa Al-Makhtoum, está viva y bien después de que apareció un video de ella alegando que era “cautiva como un rehén”.
Dominic Raab dijo a Sky News el miércoles 17 de febrero que el video era “profundamente preocupante” y agregó: “Dado lo que acabamos de ver, creo que la gente solo a nivel humano querría ver que ella está viva y bien”. “Cuando hay un problema de derechos humanos o un caso muy delicado, no eludimos nuestras responsabilidades”, agregó.
El multimillonario emir de Dubai, el jeque Mohammed bin Rashid al-Maktoum, posee una serie de caballos de carreras y asiste regularmente al Royal Ascot, gracias a lo cual entabló amistad con la reina Isabel II. Sin embargo, ahora se enfrenta a la desaprobación internacional por el supuesto trato que dio a su hija.
La familia real de Dubai había dicho anteriormente que la princesa está a salvo bajo el cuidado de su familia.
Según los informes, la princesa Latifa, que tiene 35 años, intentó huir de los Emiratos Árabes Unidos en 2018, pero supuestamente fue capturada por guardias armados que obedecían órdenes de su padre y fue enviada de vuelta a la casa de su familia en Dubai, donde ha permanecido “cautiva” desde entonces.
La BBCdifundió un video grabado en secreto por la princesa Latifa en el que afirma que está siendo “rehén”en una residencia familiar y que teme por su vida. En el video, que no ha sido verificado de manera independiente, la princesa afirma: “Soy un rehén y esta villa se ha convertido en una cárcel. Todas las ventanas están cerradas con rejas, no puedo abrir ninguna ventana”.
La hija del emir hizo una serie de acusaciones en videos grabados en el baño de la villa donde se encuentra “retenida como rehén” porque era “la única puerta que podía cerrar con llave”.
La oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos dijo que exigirá respuestas del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos sobre la princesa.
“Ciertamente plantearemos estos nuevos desarrollos a los Emiratos Árabes Unidos. Otras partes del sistema de derechos humanos de la ONU con mandatos relevantes también pueden involucrarse una vez que hayan analizado el nuevo material”, dijo el portavoz de ACNUR, Rupert Colville, a la BBC.
Ni el gobierno de los Emiratos Árabes Unidos ni el jeque Mohammed, de 71 años, han comentado públicamente sobre el video, pero en 2018 las autoridades dijeron que Latifa Al Makhtoum estaba “en casa y viviendo con su familia en Dubai”y publicaron fotografías de ella cenando con Mary Robinson, ex Presidente de Irlanda y por entonces Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
La hija del emir hizo una serie de acusaciones en videos grabados en el baño de la villa donde se encuentra “retenida como rehén” porque era “la única puerta que podía cerrar con llave”.
La princesa Latifa Al-Makhtoum, prisionera desde hace años -según denuncias recurrentes- de su padre, el emir de Dubai Mohammed bin Rashid Al-Maktoum, uno de los hombres más ricos del mundo, volvió a lanzar un llamado pidiendo su liberación.
Esta vez el grito de auxilio llegó en un video desesperado de la propia Latifa, filmado a escondidas y enviado al programa «Panorama» del canal británico BBC, donde la princesa -hija del primer matrimonio del emir- afirma estar «retenida como un rehén» en un palacio de la familia en Dubai. Además, Latifa asegura que en el pasado también fue «drogada».
“Soy un rehén y esta villa se ha convertido en una cárcel. Realmente no sé si voy a sobrevivir a esta situación. La policía me amenazó con que estaría en prisión toda mi vida y nunca volvería a ver el sol”, dijo la princesa, que intentó huir del país en 2018 y fue capturada por guardias de su padre.
En el video la princesa también afirma:
-Las ventanas de la villa están enrejadas
-Ella es una rehén en la villa que ha sido convertida en cárcel
-Cinco policías patrullan la villa y dos mujeres policía adentro
-No se le permite salir a tomar aire fresco
Los videos sin fecha se grabaron durante varios meses después de que amigos lograron darle un teléfono aproximadamente un año después de su captura y regreso a Dubai, según informó la BBC. Fueron grabados en el baño de la villa donde se encuentra retenida porque era “la única puerta que podía cerrar con llave”.
La familia real de Dubai había dicho anteriormente que la princesa está a salvo bajo el cuidado de su familia.
Hace unos años, la princesa fue protagonista de un rocambolesco intento de fuga por vía marítima, que terminó con su captura de parte de las unidades de comando enviadas por su padre. Un llamado «inquietante», dijeron en la transmisión televisiva activistas por los derechos humanos, como la expresidenta irlandesa Mary Robinson, que también fue alta comisionada de la ONU.
Los derechos humanos de la hija «prisionera» del Emir de Dubai son gravemente vulnerados mientras continúa en paradero desconocido por orden de su padre.
El abogado de derechos humanos Rodney Dixon declaró: «Estamos ansiosos por asegurarnos de que la ONU tome todas las medidas posibles ahora para garantizar su seguridad, su salud y su liberación».
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Un grupo de activistas de los derechos humanos instó a la Organización de Naciones Unidas (ONU) a tomar “medidas decisivas” para proteger a la princesa “encarcelada” Latifa Al Maktoum de Dubai, ya que sus abogados creen que está en “grave peligro” a manos de su padre, el multimillonario Emir de Dubai Mohammed bin Rashid Al Maktoum. El soberano dubaití de “ordenó y orquestó” el secuestro de su hija hace dos años después de que ella intentara escapar de los Emiratos Árabes Unidos, según una sentencia del Tribunal Superior del Reino Unido en marzo.
Sin embargo, a pesar de la publicidad mundial de su difícil situación, reflejada en un documental de la BBC, Escape from Dubai: The Mystery of a Missing Princess, Latifa todavía se encuentra retenida contra su voluntad en su tierra natal. No se la ha visto en público desde que el yate de lujo en el que se alojaba con una amiga fue asaltado por comandos armados en el Océano Índico en marzo de 2018. En un video de 40 minutos, Latifa reveló que previamente había intentado salir de los Emiratos a los 16 años, pero fue capturada en la frontera, encarcelada durante tres años, golpeada y torturada por orden de su padre.
La familia real de los Emiratos Árabes Unidos insiste en que la princesa Latifa está viva, segura y viviendo con su familia en Dubai. Sin embargo, el equipo legal de la princesa ahora está llamando al grupo de trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias (WGEID) para que la ordene al gobierno Dubai que proporcione detalles exactos del paradero de Latifa. Y en una presentación, el abogado de derechos humanos Rodney Dixon declaró: “Estamos ansiosos por asegurarnos de que la ONU tome todas las medidas posibles ahora para garantizar su seguridad, su salud y su liberación”.
Dixon instó a la ONU a “tomar medidas decisivas con respecto a este caso que se ha prolongado durante un período de tiempo considerable mientras la princesa Latifa sigue en grave peligro”. El equipo legal de Latifa con sede en el Reino Unido también presentó un documento de 76 páginas al WGEID a principios de año en la que pedía la liberación inmediata de la princesa, de 36 años. Esa presentación menciona el fallo de Sir Andrew McFarlane en el Tribunal Superior en la batalla por la custodia entre la princesa Haya de Jordania y el padre de Latifa, que incluyó el hallazgo de que Latifa fue secuestrada en 2018 y su padre no fue “abierto ni honesto” al tratar de asegurarle al mundo que ella estaba a salvo bajo su cuidado.
El fallo también encontró que el jeque emprendió una campaña de “miedo e intimidación” contra su sexta esposa, la princesa Haya, quien recientemente huyó a Gran Bretaña por temor a que la matara. Rodney Dixon dijo: “Es sumamente preocupante que, a pesar de que la sentencia del Tribunal Supremo concluyó que la princesa Latifa había sido secuestrada, y en todo el mundo se pidiera la liberación urgente de Latifa, ella permanezca en cautiverio. Sus derechos humanos fundamentales están siendo restringidos y abusados injustificadamente. La comunidad internacional ya no puede quedarse al margen”.
“Estamos solicitando a los Grupos de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzadas e Involuntarias y sobre Detención Arbitraria y otros cuerpos que accedan a ella sin demora y se aseguren de que sea liberada ilesa”, reclamó Dixon. “Es más vital que nunca ahora que la ONU tome todas las medidas necesarias para asegurar la liberación inmediata de Latifa después de haber estado detenido ilegalmente en los Emiratos Árabes Unidos durante más de dos años”.
El abogado David Haigh, que lidera la campaña mundial #FreeLatifa recordó que el Emir de Dubai está “asediado” internacionalmente a causa de las denuncias, que incluyen el secuestro de otra hija que también intentó escapar de su violento control. “En los meses transcurridos desde el juicio de Londres, numerosas personas han indicado que se distanciarán de la tóxica dinastía Al-Maktoum, incluida la reina Isabel II del Reino Unido. Ahora es el momento de que la ONU agregue su considerable peso a la lucha contra los abusos de los derechos humanos perpetrados por el régimen de los Emiratos Árabes Unidos”.
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Activistas de derechos humanos acusan al emir de «torturar a disidentes políticos mediante electrocución» y de coartar la libertad de expresión.
Cuando el jeque Mohammed bin Rashid al-Maktoum se convirtió en Vicepresidente y Primer Ministro de los Emiratos Árabes Unidos, prometió modernizar su país y convertirlo en «uno de los mejores del mundo» para 2021. Ahora, la reputación del “jeque modernizador” de Dubai está por los suelos después de que un juez británico descubriera que había secuestrado y secuestrado a sus propias hijas adultas después de que se atrevieran a hacerle frente. Más grave aún, su esposa más joven, la princesa Haya de Jordania, escapó de Dubai para refugiarse en Londres, desde donde acusa a su marido de amenazarla, hostigarla y pretender entregar a su hija de 11 años como esposa del futuro rey de Arabia Saudita, de 35 años. En el plano global, activistas de derechos humanos acusan al emir de «torturar a disidentes políticos mediante electrocución» y «espiar», así como «dirigir campos de detención secretos en un Yemen devastado por la guerra».
Nacido el 15 de julio de 1949, fue uno de los cuatro hijos del jeque Rashid bin Saeed al-Maktoum, emir de Dubai. Pronto aprendió a cazar y al deporte árabe de la cetrería. Mientras que su padre le enseñó habilidades básicas de equitación, se estaba preparando para el alto cargo. En 1966 fue enviado a Gran Bretaña para estudiar en la Bell School of Languages en Cambridge, donde desarrolló una pasión por la poesía (publica regularmente escribiendo en su cuenta de Instagram). Se matriculó en un curso de seis meses en la Escuela de Cadetes de Oficiales de Mons en Aldershot, donde recibió la espada de honor por su alto rendimiento. Dos años después, Mohammed regresó a Dubai y se convirtió en Jefe de la Policía y Seguridad Pública de Dubai antes de que su padre lo nombrara ministro de defensa. Era entonces la persona más joven del mundo en ocupar dicho cargo.
Dicho nombramiento le permitió embarcarse en una política de lucha contra la corrupción gubernamental que condujo al arresto, la acusación y el inusual “nombrar y difamar” públicamente a 14 funcionarios, incluidos seis altos oficiales. Después de aproximadamente una década de actuar como gobernante de facto de los Emiratos, en 2006, al morir su padre, se convirtió en emir de Dubai, en vicepresidente y primer ministro. Desde entonces emprendió reformas radicales en el gobierno y se le hizo responsable de convertir a Dubai en una megaciudad rica y global. Además, como uno de los monarcas más ricos del mundo, alentó el crecimiento de numerosas empresas y activos económicos de Dubai, incluidos Dubai World, Dubai Holding y Emirates.
La vida del líder de la dinastía Al Maktoum estuvo siempre envuelta en controversia. Las acusaciones sobre el secuestro de dos de sus hijos, las princesas Shamsa y Latifa, salieron a la luz el durante el caso de alto perfil del Tribunal Superior que involucra a su esposa, la princesa Haya de Jordania, que huyó de Dubai en 2019. No es novedoso si se tiene en cuenta que la Organización Árabe de Derechos Humanos enumeró 16 métodos diferentes de tortura utilizados por el gobierno y las familias reales emiratíes, incluida la electrocución. Mientras tanto, Amnistía Internacional acusó a esta monarquía de dirigir prisiones secretas en Yemen, donde los prisioneros son desaparecidos y torturados por la fuerza.
El emir también fue criticado por grupos de derechos humanos por presuntas infracciones, presidiendo como lo hace sobre un sistema judicial que ordena la ejecución de delincuentes por pelotón de fusilamiento, ahorcamiento o lapidación. La sentencia por flagelación, un castigo legal por delitos penales como el adulterio, el sexo prematrimonial y el consumo de alcohol, oscila entre 80 y 200 latigazos. La apostasía del Islam y la homosexualidad son crímenes punibles con la muerte, mientras que las mujeres en el país requieren permiso de los guardianes para casarse y volverse a casar.
No está permitido ser crítico con el gobierno del país, las familias reales que gobiernan los emiratos, los funcionarios y la policía, de ninguna manera. Los intentos de manifestarse en público se encuentran con resistencia y la organización Human Rights Watch acusó al régimen emiratí de violar los derechos a la libertad de expresión, mientras que la inteligencia estadounidense identificó que el país desarrolló su propia aplicación de mensajería, para ser utilizada con fines de espionaje. El gobierno también fue acusado de secuestrar, detener y torturar a opositores políticos y expatriados, a menudo para extraer confesiones forzadas de supuestos complots para derrocar al régimen. Por ejemplo, durante la Primavera Árabe en 2011, al menos 100 activistas fueron encarcelados y torturados.
El desaire real ocurre después de que la justicia londinense concluyera que el autócrata secuestró a dos de sus hijas y amenazó a su esposa.
La prensa británica asegura este sábado que la reina Isabel II se negará a ser fotografiada con el Emir de Dubai después de que una sentencia del Tribunal Superior dictaminó que secuestró a dos de sus hijas y amenazó de muerte a su esposa. La decisión de esquivar al jeque Mohammed bin Rashid al-Maktoum, de 70 años, vicepresidente y primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos, y gobernante del Emirato de Dubai, podría tener un efecto duradero en las relaciones británicas con la pequeña pero riquísima nación del Medio Oriente, dijeron los medios.
Durante décadas, la reina y el jeque Mohammed fueron fotografiados juntos en público, y la monarca incluso invitó al jeque a presenciar las carreras de Ascot desde el exclusivo palco real. Los rumores de un desaire real, reportado por el periódico londinense The Times, se producen después de que el emir, uno de los hombres más ricos del mundo, fuera expuesto por haber emprendido una campaña de “miedo e intimidación” contra su esposa más joven, la princesa Haya de Jordania, que huyó a Gran Bretaña el año pasado temiendo que ser asesinada. La reina también evitará ser vista con la princesa, informó el Times.
La amistad se extiende por separado a la esposa del jeque, Haya bint Al Hussein, cuyas pruebas aportadas en la corte ayudaron a exponer la brutalidad con la que el emir gobierna a la familia real. El padre de Haya, el fallecido rey Hussein de Jordania, fue un cálido y firme aliado del Reino Unido y un amigo cercano de la familia real británica. La princesa, una jinete consumada que cabalgó por su país en los Juegos Olímpicos de Sydney, prodigó elogios a la reina cuando le otorgó el primer premio a la trayectoria de la Federación Ecuestre Internacional: “Ella es una verdadera amazona que cabalga cuando los negocios estatales lo permiten. Su conocimiento de la cría y los linajes es increíble”. Para proteger a su hermana, el actual rey jordano, Abdallah II, le concedió un cargo diplomático en la embajada de su país en Londres.
La sentencia condenatoria del Tribunal Superior dice que el monarca secuestró a dos de sus hijas antes de emprender una aterradora campaña de intimidación y acoso contra su ex esposa después de que tuvo una aventura con un guardaespaldas británico, lo que podría significar que violó la ley penal inglesa y los “derechos humanos aceptados”. Según el abogado de Haya, Sir Andrew McFarlane, el multimillonario jeque dubaití “utilizó sus poderes muy sustanciales a su disposición” para secuestrar a la princesa Shamsa durante unas vacaciones familiares en Inglaterra en 2000, y detener a la princesa Latifa, de 32 años, en Dubai en contra de su voluntad cuando intentó huir en 2002 y 2018. A su juicio, Sir Andrew dice que las acusaciones de Haya “se reducen a tres reclamos: el emir “ordenó y orquestó” el secuestro ilegal de Shamsa de Gran Bretaña, organizó dos veces el “regreso forzado” de Latifa a la casa familiar antes de privar a las dos mujeres de su libertad y lanzar una campaña de acoso el año pasado contra ella.
Esta fue, según los abogados de la princesa Haya de Jordania, la razón clave por la que huyó de Dubai al Reino Unido en 2019.
Ante el tribunal que dirime su caso en Londres, la princesa Haya Al Hussein de Jordania aseguró que su esposo, el emir de Dubai, comenzó las negociaciones para organizar el matrimonio de su hija menor, la princesa Al-Jalila de 11 años, con el príncipe heredero de Arabia Saudita, de 35 años, siguiendo una práctica tradicional entre las monarquías de Oriente Medio, en la que reyes y emires “ofrecen” a sus hijas a otros gobernantes con el fin de mantener la amistad política. Esta fue, según confirmó Haya de Jordania, la razón clave por la que huyó de Dubai al Reino Unido.
El tribunal escuchó a los abogados de Haya afirmar que el emir supuestamente discutió los arreglos para obligar a su hija menor a casarse el príncipe en febrero de 2019 con el príncipe saudita, conocido como “MBS”, hijo y heredero del anciano rey Salman y gobernante de facto del reino desde 2017. El joven príncipe es fuertemente sospechado de haber ordenado el asesinato del periodista del Washington Post, Jamal Khashoggi, en 2018, y en enero de este año fue acusado de hackear el teléfono del hombre más rico del mundo, Jeff Bezos, propietario de Amazon.
El futuro rey saudita, de 34 años, que ya tiene una esposa, estaba entonces en el centro de la indignación internacional después de que se le culpó por el horrible asesinato de Khashoggi dentro del consulado saudí en Estambul en 2018. El emir negó enérgicamente las afirmaciones de Haya, su sexta esposa. “Ninguno de sus hijos ha sido forzado al matrimonio o comprometido a esta edad. Nunca ha habido un plan así”, dijo uno de sus abogados en Londres.
El 7 de febrero de 2019 Mohammed al Maktoum se divorció de la princesa Haya siguiendo la norma islámica más estricta: el marido anuncia que la repudia sin necesidad de que la esposa conozca la situación. Dos meses más tarde, la princesa Haya de Jordania escapó de Dubai con sus hijos, Jalila y Rashid. Por precaución, sin embargo, el Tribunal Superior británico encargado de decidir sobre la custodia de los niños inicialmente otorgó una “orden de protección matrimonial forzada” para proteger a Jalila y dejarla al cuidado de su madre en tanto comenzaba la presentación de pruebas en contra del emir.
En los primeros días de marzo, después de varios meses de audiencias, el juez dijo que las afirmaciones de la princesa Haya se basaron en “rumores” que no cumplían con el estándar de prueba requerido, y agregó: “No encuentro, en estas circunstancias, que esta acusación esté probada”. El caso, sin embargo, despierta grandes temores sobre lo que podría suceder con la princesa Jalila si la corte británica decide que regrese a Dubai al cuidado de su padre, ya que en los últimos años se conocieron detalles sobre las angustiantes situaciones que sufren sus hermanas Shamsa y Latifa (hijas de otras esposas del emir), que intentaron escapar sin éxito de Dubai y acusaron a su padre de mantenerlas en confinamiento bajo amenazas y maltratos constantes.
Acoso, amenazas y secuestros
La sentencia condenatoria del Tribunal Superior, que sigue a una prolongada batalla por la custodia de los hijos entre el emir y su esposa más joven dice que el monarca secuestró a dos de sus hijas antes de emprender una aterradora campaña de intimidación y acoso contra su ex esposa después de que tuvo una aventura con un guardaespaldas británico, lo que podría significar que violó la ley penal inglesa y los «derechos humanos aceptados». Según el abogado de Haya, Sir Andrew McFarlane, el multimillonario jeque dubaití “utilizó sus poderes muy sustanciales a su disposición” para secuestrar a la princesa Shamsa durante unas vacaciones familiares en Inglaterra en 2000, y detener a la princesa Latifa, de 32 años, en Dubai en contra de su voluntad cuando intentó huir en 2002 y 2018. A su juicio, Sir Andrew dice que las acusaciones de Haya “se reducen a tres reclamos: el emir “ordenó y orquestó” el secuestro ilegal de Shamsa de Gran Bretaña, organizó dos veces el “regreso forzado” de Latifa a la casa familiar antes de privar a las dos mujeres de su libertad y lanzar una campaña de acoso el año pasado contra ella.
El abogado también dijo al Tribunal Superior que podría haber habido un complot para encarcelar a Haya, la hija del difunto rey Hussein de Jordania, en un «Awir», una cárcel, en los meses previos a su huida. Con respecto a la supuesta sustracción de las dos hijas, Sir Andrew escribió: “Descubrí que el padre actuó como lo hizo con respecto a Shamsa y Latifa, y descubrí que continúa manteniendo un régimen por el cual estos dos jóvenes las mujeres se ven privadas de su libertad, aunque dentro del alojamiento familiar en Dubai”. Añadió: “Sobre esa base, la afirmación de que Shamsa ha sido privada de su libertad durante muchas, si no todas, las últimas dos décadas, viviendo en circunstancias como la descrita por Latifa, está comprobada”.
Sir Andrew señaló al tribunal cuán “extraordinario” es hacer “hallazgos de alto nivel” sobre un gobernante de un estado federal de los Emiratos y el jefe del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos sobre las afirmaciones de una “campaña sostenida” contra una ex esposa y princesa. “Además, el padre es una persona que visita regularmente el Reino Unido y tiene importantes hogares en Inglaterra. Se dice que tanto él como la madre mantienen relaciones respetuosas y amistosas con la familia real británica. Es un hombre de prominencia internacional cuya posición y posición internacional justifican un alto nivel de respeto”, afirmó. (S.C.)
Ocho meses después de que la princesa Haya Al-Hussein huyera de Dubai y se refugiara en Londres, un tribunal de la capital británica publicó un Fallo de determinación de hechos (FFJ) que establece que su esposo, el emir de Dubai, es el responsable responsable del secuestro y el retorno forzado de dos de sus hijas, las princesas Shamsa y Latifa, de otro matrimonio.
El jeque Mohammed Al-Maktoum, había intentado, sin éxito, mantener el fallo fuera del dominio público, pero su apelación fue rechazada después de que se dictaminó que era de interés público. Se descubrió que el gobernante de Dubai “no había sido abierto y honesto con la corte”. Después de escuchar extensas declaraciones de testigos durante un período de tiempo, el tribunal determinó que Sheikh Mohammed fue «continúa manteniendo un régimen por el cual las dos jóvenes se ven privadas de su libertad».
Shamsa huyó de la familia real en el Reino Unido en Surrey en 2000, pero luego fue recapturada en Cambridgeshire por agentes de su padre, inyectada con un sedante y devuelta al emirato donde permanece aún en cautiverio. Una solicitud de la policía británica para visitar Dubai para investigar su secuestro fue rechazada, informó BBC News.
Su hermana, la princesa Latifa, hizo dos intentos fallidos de huir de la corte de Dubai, en 2002 y 2018. Después del primero, fue encarcelada por su padre por más de tres años. En el segundo intento, fue recapturada por agentes armados a las órdenes del jeque en un yate frente a la costa india y regresó a la fuerza a Dubai, donde permanece bajo arresto domiciliario. El juez consideró que sus acusaciones de abuso físico grave equivalente a tortura, hechas por Latifa en un video público, son creíbles.
Pero a principios de 2019, la princesa Haya comenzó a sospechar y expresó sus preocupaciones a sus amigos sobre si le pasaría lo mismo a ella. Entre rumores de que ella mantenía un romance adúltero con su guardaespaldas británico, agentes del jeque iniciaron una campaña de intimidación y el tribunal escuchó que un arma fue colocada dos veces en su almohada con el cierre de seguridad. Además, un helicóptero aterrizó fuera de su casa con la amenaza de trasladarla a una prisión remota del desierto. El juez dictaminó que «el padre, por lo tanto, actuó de una manera desde finales de 2018 que tuvo como objetivo intimidar y asustar a la madre, y que alentó a otros a hacerlo en su nombre».
El tribunal londinense escuchó cómo el emir había usado sus contactos en los medios británicos para generar una serie de artículos negativos sobre la princesa Haya, muchos de los cuales fueron «totalmente inexactos», dijeron. Estas sentencias, y las alegaciones confirmadas por la justicia, son claramente una gran vergüenza personal para el jeque Mohammed Al-Maktoum. Por lo tanto, no es sorprendente que su equipo legal haya hecho todo lo posible para mantenerlos fuera del dominio público, dijo el periodista Frank Gardner de la BBC.
El gobierno británico habría sido presionado por el monarca para obligar a la princesa Haya Al Hussein a regresar al país, dice el diario The Guardian.