La publicación de la nueva edición de una biografía no autorizada del príncipe Harry y su esposa Meghan Markle -“Finding Freedom”, de Omid Scobie y Carolyn Durand- promete ser un golpe directo a la reina Isabel, de 95 años, sobre la delicada cuestión del racismo en la familia real, según preanunció este jueves la prensa británica.
En el libro, según anticiparon los periódicos The Sun y The Daily Mail, sobresale un breve pasaje atribuido a la pareja “rebelde”, ahora exiliada en Estados Unidos, donde se lamentan de que la familia real no se hizo aún “plenamente cargo” de su “responsabilidad” ante la denuncia de racismo que pronunciaron en la famosa entrevista con Oprah Winfrey.
En esa ocasión, la duquesa de Sussex dijo que un miembro de primer plano de la familia real -pero no los abuelos de Harry, la reina y su marido, el fallecido duque de Edimburgo- habrían planteado “preocupaciones” por el color de la piel de su primer antes de su nacimiento, ya que Meghan es de madre afroamericana.
Según los mencionados diarios, la crítica alude al comunicado con que, tras aquella revelación, la reina Isabel II se dijo “entristecida”, comprometiéndose en privado a profundizar el caso y hacer lo necesario para erradicar las sospechas de racismo del palacio. En esa ocasión, la reina aludió a la posibilidad de que el recuerdo exacto del episodio incriminado pudiera “variar” en la memoria de los duques de Sussex, un elemento de reserva que no gustó nada al matrimonio.
La respuesta de los abogados de Harry y Meghan
Los abogados del príncipe Harry y Meghan negaron de inmediato que la pareja haya “reavivado una ruptura”’ con la reina después de la actualización de la biografía. Dijeron a The Daily Mail que la nueva edición sugiere que los duques de Sussex “no se sorprendieron” por la falta de acción percibida y que “se opusieron” a una declaración de la reina.
Los abogados de los duques de Sussex insistieron en que no hubo novedades sobre el tema y que las afirmaciones eran de los autores del libro, Omid Scobie y Carolyn Durand, que no hablan por Harry y Meghan y dependen de fuentes independientes no identificadas.
Scobie también trató de aclarar la situación: “De vuelta en este rodeo y, como era de esperar, las palabras ya se están distorsionando. Los comentarios hechos por una FUENTE (un detalle que algunos medios han ignorado intencionalmente) se referían a la falta de propiedad de la institución real en su conjunto. No hay ‘ataque’ contra la reina en ninguna parte del libro”.
Monarquias.com / The Sun / The Daily Mail
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