Dividido entre conservadores y progresistas, el gobierno está considerando crear un nuevo sistema que permita a las mujeres conservar un rango dentro de la Casa Imperial.
El gobierno de Japón anunció está considerando crear un nuevo título honorífico para las mujeres de la Familia Imperial que pierden su estatus imperial después del matrimonio, de forma que puedan participar oficialmente en las actividades públicas de la corte.
Desde hace varios años, las preocupaciones de que el número de miembros de la familia imperial se reduzca aún más en el futuro están creciendo, ya que eso provocará que menos personas realicen tareas públicas encomendadas por el Gobierno.
Bajo la Ley de la Casa Imperial de 1947, solo los hombres de la familia imperial -hijos de emperadores y de príncipes imperiales- pueden ascender al trono, mientras que las mujeres de la familia que se casan con plebeyos deben abandonar la familia imperial.
La princesa Aiko, la hija del emperador Naruhito y la emperatriz Masako, así como las hijas del príncipe heredero Akishino, Mako (28) y Kako (26), se encuentran entre los miembros de la familia imperial que recibirían el nuevo título después del matrimonio. La exprincesa Sayako, la hermana menor del emperador que dejó la casa imperial al casarse con un plebeyo en 2005, también tendría derecho, según las fuentes.
El plan que se está lanzando para otorgar el título honorífico “kōjo” (mujer imperial) a las mujeres casadas de la familia imperial también es una alternativa para permitirles retener el estatus de miembro de la familia imperial. La creación del nuevo título se considera más fácil de aceptar para los conservadores que están en contra de permitir que las mujeres tomen el trono o que las mujeres casadas permanezcan en la casa imperial, informó el diario Japan Times.
El gobierno se enfrenta a una necesidad imperiosa de decidir cómo garantizar una sucesión imperial estable, dado que actualmente solo hay tres herederos, el príncipe heredero Akishino, de 54 años, su hijo de 14 años, el príncipe Hisahito, y el tío del emperador, el príncipe Hitachi, de 84 años. Por eso, se cree que la nueva idea “puede ganar apoyo más allá de las líneas partidistas”, según dijo una persona cercana al primer ministro Yoshihide Suga, citada por el periódico.