Fue la última morada de reyes y príncipes y desde el 1 de marzo se restaurará y modernizará. Los ataúdes reales serán trasladados temporalmente.
La cripta de la dinastía Hohenzollern en la Catedral de Berlín será reformada, según dio a conocer hoy la arquitecta encargada Sonja Tubbesing en la presentación del proyecto. Las obras en la cripta ubicada debajo de la antigua iglesia evangélica de Berlín -Berliner Dom- comenzarán el 1 de marzo y concluirán en la primavera de 2023, mientras decenas de ataúdes de emperadores, reyes y príncipes serán trasladados a otro lugar que no se reveló.
Según aseguró Tubbesing, la cripta dinástica más importante de Alemania adquirirá así un lugar más relevante entre las tumbas imperiales más importantes de Europa. Como ejemplo mencionó la Cripta Imperial en la Iglesia de los Capuchinos en Viena. Según informó el diario alemán BZ, la Cripta de los Hohenzollern será restaurada por 18 millones de euros (19,5 millones de dólares) y, entre otras cosas, será dotada de un nuevo concepto de iluminación y por primera vez de aire acondicionado.

La reforma será financiada por el Estado federal y la ciudad-Estado de Berlín así como por donantes privados informó el diario Berliner Kurier. Según explicó Stephan Harmening, director del ente que gestiona la Catedral de Berlín, en las deliberaciones sobre la reforma participaron también herederos de los Hohenzollern. En el sótano debajo de la iglesia descansan unos 90 miembros de la dinastía, entre ellos, el gran elector y rey Federico I de Prusia y su segunda esposa, Sofía-Carlota, así como Isabel Cristina, consorte de Federico II el Grande.
La cripta se abrió al público por primera vez en noviembre de 1999. Cada año visitan la catedral y la cripta unas 765.000 personas, entre ellas un 80 por ciento de extranjeros. Los ataúdes de 500 años serán ubicados como en un cementerio, de manera que los visitantes puedan moverse más libremente por el espacio. También será modificada la entrada, que hoy sólo es posible a través de una escalera estrecha. En el futuro se podrá llegar a la cripta directamente desde la iglesia. Además, en un salón informativo se reflejará la historia de los Hohenzollern para que los visitantes se interioricen antes de bajar a la cripta.
