La Casa de Windsor no tiene paz: se divorcia el nieto mayor de la reina Isabel II


En “shock”, Peter Phillips se separará de su esposa canadiense, Autumn Kelly, después de 12 años de matrimonio.

El nieto mayor de la reina Isabel II de Inglaterra, Peter Phillips, se separó de su esposa canadiense de que ella solicitara el divorcio, afirmaron este lunes los periódicos londinenses que citaron a “amigos” de la pareja. La prensa británica destaca la noticia en las portadas matutinas y afirmas que Autumn Phillips, de 41 años, le dijo a su esposo, de 42 años, que quiere separarse, dejándolo “absolutamente devastado” y la reina «molesta» ante la decisión. “Peter pensó que estaba felizmente casado y que tenía la familia perfecta con dos hijas encantadoras. Pero ahora está en estado de shock total”, afirmó un conocido.

Personas familiarizadas con el tema dijeron que Phillips, hijo mayor de la princesa Ana, “no vio venir el colapso de su matrimonio y se sorprendió por la solicitud de su esposa”. Según el diario The Sun, las fuentes también sugieren que la decisión del príncipe Harry y de Meghan Markle de renunciar a la familia real apresuró la decisión de Autumn y ahora “quiere regresar a su Canadá natal” con sus dos hijas, Savannah (de 9 años) e Isla (de 7), quienes tienen doble ciudadanía. Las fuentes agregaron que Autumn muy querida por la reina Isabel y que este nuevo divorcio deja la sensación de que la familia real se está “desmoronando”.

Un matrimonio trabajador

Autumn Kelly nació en Canadá en 1978 y fue criada en una familia católica, pero renunció a su fe poco antes de su boda para que su futuro esposo no tuviera que renunciar a su derecho al trono. El nieto mayor de la reina y Autumn se conocieron durante el Gran Premio de Montreal de 2003, donde ambos trabajaban, aunque ella no se dio cuenta de que era el nieto de la monarca en ese momento. Después de salir durante unos años, Peter le pidió matrimonio y en 2008 se casaron en la Capilla de St. George (castillo de Windsor) en presencia de toda la familia real.

Aunque tiene derecho al trono, Peter Phillips no tiene un título real ya que su madre se negó a aceptar que sus hijos pertenecieran a la realeza con el objetivo de que llevaran una vida corriente. Después de graduarse de la Universidad de Exeter con un título en ciencias del deporte, el hijo de la princesa Ana y el capitán Mark Phillips trabajó para Jaguar como gerente de hospitalidad corporativa antes de tomar un puesto como gerente de cuentas senior en el equipo de ingeniería del Gran Premio de Williams.

Peter rara vez hace apariciones públicas y no recibe dinero del contribuyente, por lo que tiene que trabajar para ganarse la vida. Por esto, vivió con su esposa en Hong Kong después de dejar su puesto en el Royal Bank of Scotland (que había ocupado durante más de 7 años) para dirigir sus actividades de patrocinio en la región. En junio de 2012, Phillips creó Sports & Entertainment UK Ltd. en Londres, compañía se enfoca en aumentar el «valor comercial para los titulares de derechos deportivos y de entretenimiento en el Reino Unido», según su sitio web.

Peter y Autumn viven en Astom Farm, una mansión situada en Gatcombe Park, una finca ubicada a unos 160 kms. de Londres que Isabel II regaló a su hija en 1976. Peter se encuentra entre los beneficiarios de un fondo fiduciario de £ 19 millones establecido por su bisabuela, la reina madre, fallecida en 2002. Alrededor de dos tercios de su fortuna estaban reservados para sus bisnietos (así como a los hijos de la princesa Margarita) como un regalo exento de impuestos, pero nunca se estableció qué porcentaje de ese fondo correspondió a cada heredero.

La separación de su nieto mayor agrega un capítulo dramático a un nuevo “annus horribilis” para la reina Isabel, de 93 años. El año 2019 empezó con un grave accidente automovilístico en Norfolk sufrido por su marido, el príncipe Felipe, de 97 años. Más tarde, los duques de Sussex fueron criticados por su “hipocresía” sobre el cuidado del medio ambiente y se quejaron de ser asesiados y criticados por la prensa. Más tarde, el príncipe Andrés se retiró de la vida oficial al ser involucrado en el caso del pedófilo y millonario estadounidense Jeffrey Epstein. Apenas unos después de iniciado 2020, otro “golpe” dejó a la familia real “decepcionada” y “herida” por la decisión del príncipe Harry de anunciar su renuncia a la casa real.