El duque de York fue acusado por una estadounidense de haberla obligado a mantener relaciones sexuales cuando era menor, lo que él niega.
El gobierno británico ha cambiado la política de enarbolar banderas en los cumpleaños de los miembros senior de la familia real, y las autoridades locales ya no estarán obligadas a izar la bandera nacional para celebrar el cumpleaños 60 del príncipe Andrés, el próximo 19 de febrero. Según el diario The Guardian, las autoridades habían dicho que estaban considerando cómo se aplicaba la política «en circunstancias cambiantes, como cuando los miembros de la familia real se retiran de sus deberes», según un portavoz del primer ministro Boris Johnson.
Más tarde, el gobierno dijo que aconsejaría a los gobiernos locales «que no es necesario izar banderas el 19 de febrero tras la decisión del duque de York de retirarse de los deberes públicos en el futuro previsible». El segundo hijo de la reina Isabel II se retiró de la vida pública y los deberes oficiales después de una desastrosa entrevista televisiva en la que defendió su amistad con el delincuente sexual estadounidense Jeffrey Epstein, que se suicidó en agosto pasado.
Los días designados para enarbolar el pabellón británico en los edificios del gobierno del Reino Unido incluyen los cumpleaños de la reina y su esposo, el príncipe Felipe, el día de su boda, los cumpleaños de sus cuatro hijos y de su nieto, el príncipe Guillermo y su esposa, la duquesa de Cambridge. Pero el príncipe ahora cayó en desgracia y su impopularidad afectó los planes de boda de su hija mayor, Beatriz.
Andrés negó enérgicamente las afirmaciones de haber tenido relaciones sexuales con Virginia Giuffre cuando ella tenía 17 años y fue contratada por Epstein, un financiero encontrado muerto en prisión en agosto del año pasado mientras esperaba cargos por tráfico de menores. En noviembre pasado hubo una gran controversia pública después de que el duque de York concedió una entrevista a la BBC donde no pudo explicar adecuadamente por qué no cortó los lazos con su amigo antes, ni expresó mucha empatía con las presuntas víctimas de Epstein. En tanto, un fiscal estadounidense dijo el mes pasado que el príncipe había brindado «cooperación cero» a la investigación.
El jueves pasado, en tanto, la Casa Real dijo que el duque de York había pedido diferir una promoción militar al almirante hasta que pueda reanudar completamente sus deberes reales. «Por convención, el duque de York estaría en la fila para la promoción militar en su 60 cumpleaños», dijo la portavoz. «Tras la decisión de Su Alteza Real de retirarse de los deberes públicos en el futuro previsible, el Duque de York ha preguntado al Ministerio de Defensa si esta promoción podría diferirse hasta el momento en que Su Alteza Real regrese al servicio público».
Como un pequeño consuelo para Andrés, las campanas de la Abadía de Westminster sí sonarán en su honor en su cumpleaños, como lo hacen tradicionalmente para los cumpleaños de la reina y los demás miembros senior de la Casa de Windsor. Citada por la agencia Press Association (PA), una portavoz de la Abadía, templo emblemático de la monarquía británica durante más de 900 años y sitio de coronaciones y bodas reales, dijo que “no hay planes para cambiar estos arreglos”.
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